Resumen de los aspectos más importantes que debe recordar

• El uso recreativo de drones puede ocasionar riesgos relativos a la privacidad y la protección de datos, que son derechos protegidos por ley.
• El concepto de privacidad engloba diversos subtipos: corporal, del comportamiento, de la imagen y la información, de la ubicación y el espacio, y de asociación.
• El uso recreativo de drones puede ocasionar riesgos relativos a la protección de datos cuando se utilizan para recopilar y procesar datos personales que permiten identificar a una persona durante actividades que no se encuadran dentro de las exenciones permitidas para el ámbito doméstico.
• La presencia de un dron puede suponer una infracción de la privacidad incluso aunque no lleve instalada una cámara.
• Los drones equipados con cámaras o con cualquier otro sensor de grabación (como micrófonos, GPS, etc.) implican un mayor riesgo para la privacidad.
• En su calidad de usuario recreativo, no puede llevar a cabo una vigilancia visual específica o intencionada de terceros sin su consentimiento.
• El uso de un dron en espacios públicos podría suponer una intrusión de la privacidad en aquellos lugares donde los allí presentes tengan una expectativa razonable de privacidad. Hacer volar un dron en lugares públicos podría estar prohibido o restringido por las normas de seguridad aérea.
• La manifestación de estos riesgos para la privacidad de las personas mediante el uso recreativo de drones puede dar lugar a un malestar público. El malestar público puede reducirse al mínimo si se hace un uso responsable de los drones.

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